Autora：XINYUE DU
“Entre las muchas maneras de combatir la nada, una de las mejores es sacar fotografías”
– Julio Cortázar
Blow-up es como una novela modernista, sin un argumento convincente, pero con técnicas exquisitas y suficiente profundidad de pensamiento. Como dice el director Michelangelo Antonioni : "La película expresa la conexión entre los personajes individuales y la realidad. La realidad y los acontecimientos existen estrechamente en torno a los personajes”. Está claro que el director ya no se limita a registrar la realidad, sino que ha empezado a explorar la pregunta definitiva: ¿qué es la realidad? De hecho, para entonces la ola de neorrealismo en Italia ya había comenzado a disminuir, y el propio Antonioni se puso a pensar en otro nivel de realidad. El director ya ha declarado que lo que está en juego en la película es el ser humano, la persona que está en la realidad pero que termina en la irrealidad.
Así que es la gente que merece atención en Blow-up, no la trama. De hecho, la trama de la película ha sido debilitada artificialmente por el director, y los hilos narrativos no están lo suficientemente enfocados, o incluso fragmentados. De vez en cuando aparecen demasiados personajes no relacionados entre sí, lo que distrae la atención del espectador de la trama. Podemos imaginarnos lo diferente que sería Blow-up de lo que es ahora si estuviera en manos del maestro del suspenso, Hitchcock. Si uno tuviera que nombrar la trama de la película, podría simplemente decir así.
El protagonista es el fotógrafo Thomas, quien un día capturó una serie de fotos de parejas jóvenes en el parque. Sorprendentemente, Jane, una mujer de la foto, quiso devolver el cliché a toda costa. Esto desconcertó mucho a Thomas, quien creía que esta foto podría haber capturado algunos secretos ocultos. Efectivamente, después de acercar la foto, vio un cadáver y un hombre con una pistola.
Al día siguiente, cuando Thomas llegó al parque, descubrió que el cuerpo había desaparecido. Solo hay un grupo de personas jugando un partido de tenis virtual, jugando un tenis que no existe. En ese momento, una "pelota" cayó a los pies del protagonista y el jugador le indicó que lo ayudara a levantarla. Thomas se acercó, recogió la "bola" (inexistente) y regresó. Se acabó la película.
Lo que la película quería decirnos es que muchas veces lo que vemos es solo una parte de la imagen completa del evento. La capacidad de las fotografías para revelar la verdad es tan fuerte como la capacidad de ocultar hechos, y lo que vemos con nuestros ojos a menudo está determinado por lo que creemos.
Cuando agrandemos infinitamente el mundo que tenemos ante nosotros, nos encontraremos milagrosamente desaparecidos. Lo que nos preocupa no existe. Finalmente, cuando Thomas arrojó una pelota de tenis inexistente a un lugar antiestético, la historia volvió al principio: ¿cree en sus propios ojos o cree en la cámara que nunca se ha dejado ? El mundo real es solo un juego entre nosotros y la irrealidad. Existe, no existimos. Existimos, pero la sentimos todo el tiempo. La única verdad es la irrealidad, y la aceptamos .
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